Una boa constrictor fue hallada sobre la vía Mogotes, y miembros de la Policía de Carabineros la acercaron hasta las instalaciones de la Corporación Autónoma Regional de Santander; dentro de su estómago alberga una gran presa, que le impide una movilidad ágil.
El médico veterinario de la CAS, Luis Emilio Atuesta, comento que, “Se le tiene con cuidado especial, por el peso que se observa en su panza, digerir esa presa puede demorar varias semanas”.
Las boas se alimentan de prácticamente cualquier animal que consigan atrapar, sus mandíbulas se pueden estirar ampliamente para tragar presas grandes de una sola pieza.
Estos individuos tienen como función en nuestro ecosistema reducir al número de roedores que dañan la agricultura.
Por ahora permanecerá bajo observación y en custodia de la CAS, para que ésta no pueda ser atacada, ya que su sola presencia genera cierto temor en la comunidad, y en las condiciones en las que se encuentra le impedirá huir con facilidad del peligro.
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