Según denuncian los habitantes del sector San Francisco, en Bucaramanga, los obreros que laboran en la construcción de la Cicloruta llegaron a las 4 de la madrugrada a encender los taladros para romper el pavimento, razón por la cual salieron a protestar por el ruido, pero al cuestionar a los trabajadores se dieron cuenta que estaban siendo custodiados por la policía.
Los residentes en San Francisco están molestos y aseguran que han tenido que pasar noches enteras de desvelo, pues el ruido de los taladros no les deja conciliar el sueño.
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Por su parte, la Policía aseguró que en ningún momento hubo agresión contra ninguna mujer, como se denunció, y que lo único que se hizo fue llevarla a la estación del norte, pues estaba se comportó de manera agresiva contra los que estaban en el lugar.
