Mediante una acción de tutela, el Hospital Universitario de Santander busca reversar el embargo de las ambulancias de la institución ordenado por un juez a solicitud de la regional del Sena. También se pedirá a la Procuraduría una investigación sobre el controvertido e insólito procedimiento judicial.
Hoy siguen sin poder funcionar las seis ambulancias que se encuentran en los parqueaderos del hospital universitario y otra que ya fue llevada a los patios de la dirección de tránsito de Bucaramanga. Las medida tiene que ver el cobro coactivo de dos mil millones de pesos que adelanta el Sena, tras una sanción interpuesta por el Ministerio del Trabajo al centro médico.
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Con una acción jurídica se busca detener el embargo que se hizo efectivo el viernes pasado.
El caso, según las directivas del Hospital, será llevado a conocimiento de los órganos de control para que se pronuncie sobre el insólito procedimiento.
