Super Tank, como fue bautizado, mide un metro y 29 centímetros de alto, 50 centímetros de ancho y una profundidad de 60 centímetros.
Tiene una pantalla que facilita la reproducción de videos y además posee unas luces ultravioletas que desinfecta superficies.
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El robot se maneja a control remoto mediante una aplicación que se instala en el celular.
Aunque actualmente no está funcionando en las clínicas y hospitales, esperan que muy pronto los centros clínicos le den el aval para poder operar.
Esta iniciativa nació en medio de la pandemia que ha hecho que algunas empresas se reinventen, obligandolas a cambiar de actividad, pero sin dejar el sello que los caracteriza.
Super tank hará lo que no pueden hacer las personas y es poder llevar un saludo, un abrazo y decirle adiós a los seres queridos que no logran ganar esta batalla contra el Covid-19.
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