Un ciudadano venezolano perdió contacto con su esposa cuando ambos se deplazaban camino hacia Bucaramanga. Asegura que kilómetros antes de llegar a su destino dos mujeres se ofrecieron a acercarla, desde entonces no sabe nada de ella y ahora la busca desesperadamente.
Esteban Fuenmayor tenía cinco días de estar caminando en compañía de su esposa, Adriana Lorena Romero; a unos 25 kilómetros antes de llegar a Bucaramanga, se detuvo un carro y les ofrecieron cupo pero solo a la mujer. El cansancio de Adriana hizo que la pareja aceptara la propuesta de buena fe.
Esteban siguió el camino con pasos más largos, ansioso de encontrarse con su mujer, lo que no ha ocurrido hasta el momento.
Este migrante no tiene celular y su única esperanza es el Facebook, al que ingresa todos los días al menos cinco minutos para enviar mensajes y solicitar apoyo para obtener información sobre el paradero de Adriana Lorena.
Esteban guarda la esperanza de que su esposa aún esté con la familia que la recogió. Tan pronto la encuentre seguirá su camino hacia El Socorro, en donde los esperan para trabajar en una finca cafetera.
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