Una mujer venezolana ha estado a punto de ser asesinada por un santandereano quien, tiene una obsesión con ella, le ha prendido hasta candela.
Pese a que el hombre se encuentra tras las rejas, ella teme por su vida porque desde la cárcel, él la continua amenazando.
Yolanda Herrera se gana la vida cantando en sitios nocturnos y dando serenatas, y aunque es educadora de profesión pero le tocó recurrir a su talento artístico para sobrevivir, luego de emigrar desde Venezuela, su país de origen.
Fue el año pasado, para un día de las madres, cuando la contrataron para cantar en un bar de San Rafael de Lebrija, corregimiento de Rionegro. Allí conoció al dueño del establecimiento comercial, quien poco a poco se fue enamorando de Yolanda, hasta el punto de obsesionarse con ella.
Tal fue la obsesión del hombre que ella decidió alejarse e irse a San Alberto, Cesar, municipio hasta el que la persiguió.
Yolanda seguía en San Alberto huyendo de aquel hombre, pero una noche del mes de junio de 2017, el sujeto llegó hasta su casa y, tan pronto ella abrió la puerta, la atacó.
Casi dos meses estuvo hospitalizada en Bucaramanga, las quemaduras le marcaron su cuerpo, y a ella le tocaba guardar silencio, por una sencilla razón, sus papeles.
Al salir de la clínica el hombre se la volvió a llevar a San Rafael de Lebrija, donde la mantuvo encerrada por otro periodo de tiempo, Yolanda a veces podía salir y en otras oportunidades simplemente permanecía prisionera.
El 25 de junio del 2018 otra venezolana, quien conoció la historia, le propuso que se escaparan, pero el intento que resultó fallido.
Desde entonces, el hombre de 42 años está privado de la libertad por el delito de intento de feminicidio y, pese a que está tras las rejas no deja de asechar a Yolanda.
Por el momento la denuncia continúa en la Fiscalía, aún no se ha dictado una sentencia y Yolanda teme que el proceso judicial se detenga por el hecho de ella estar indocumentada.
Ahora solo pide a las autoridades se agilicen las audiencias, se dicte una condena y poder vivir con tranquilidad.
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