Ante la extraña muerte de varias iguanas en el parque Gallineral de Girón, la Secretaría del Ambiente y funcionarios del Área Metropolitana de Bucaramanga, iniciaron una campaña para proteger la fauna silvestre del sector.
Una de las principales consignas es que las personas no le arrojen comida hecha con ingredientes a base de sal a iguanas, aves y ardillas que habitan el parque.
La campaña está encaminada a preservar las especies animales que conviven con la gente en el lugar. Según uno de los expertos en biología de la entidad ambiental, los animales son objeto de una necropsia para determinar las causas de su muerte.
Para la comunidad es claro que las iguanas murieron por falta de agua; aunque hay recipientes y vasijas, estas no son suficientes para colmar las necesidades de los animales.
Otra de las propuestas es crear un sendero biológico que les permita desplazarse hasta el río de Oro, en donde era habitual que tomaran agua y se bañaran.
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