La ubicación en puntos estratégicos de la ciudad de 40 mujeres para que realicen sus ventas en la calle, ahora reguladas por el municipio, quedó en veremos, después de que las informales rechazaran el mobiliario donado por la Alcaldía de Bucaramanga, como parte del Plan Maestro de Espacio Público.
En agosto pasado se hizo el lanzamiento oficial del plan piloto, se anunciaron las tarifas, pero a la fecha no se han visto los puestos regulados.
El cobro por el uso del espacio público anunciado por la Alcaldía de Bucaramanga, que ha generado múltiples críticas, oscila entre 100 mil y 800 mil pesos por año.
El alcalde Rodolfo Hernández dijo que estas vendedoras ya se capacitaron en el Instituto Municipal de Empleo y Fomento Empresarial de Bucaramanga, Imebu, así como lo han hecho otros 325 informales de la ciudad.
De solucionarse esta situación, los vendedores informales llegarán a los parques Antonia Santos, Santander, García Rovira y Centenario, así como en la avenida Quebradaseca con carrera 15, el Paseo del Comercio, la calle 36 y la carrera 13, entre otros lugares.
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