Bucaramanga, 24 de agosto del 2018.
El fuerte vendaval del pasado jueves tumbó un gigantesco árbol que cayó sobre dos viviendas en el barrio Nueva Granada. Dos niños que estaban en el lugar se salvaron de quedar atrapados entre las ramas y el techo de la casa.
Los habitantes del sector además advirtieron del peligro que representa otro árbol que hay en el lugar.
Como en la selva quedó la vivienda, llena de ramas y escombros luego de que el fuerte vendaval que azotó a Bucaramanga arrasara con un árbol que cayó sobre la casa.
Los habitantes del barrio Nueva Granada aseguran que ya habían advertido sobre el riesgo que generaba el árbol, sin embargo la autoridad competente no hizo nada al respecto.
Ahora les queda otro dolor de cabeza, otro árbol similar también amenaza con caerse.
También puede leer: Fuertes lluvias azotan a Santander
Según otros habitantes del sector, igualmente tienen problemas de humedades, porque cuando llueve el agua se reboza y no puede evacuarse debido a que las alcantarillas están tapadas.
Las familias afectadas esperan reparar lo más rápido posible los techos de las casas para que cuando llegue otro aguacero, tengan dónde refugiarse.