Iván Darío Polanco de 15 años de edad era un niño con muchas ganas de vivir que estudiaba, jugaba y salía con amigos como lo hace cualquier joven de su edad y pero su vida cambió de repente cuando le detectaron aneurisma que afectó una parte de su cerebro viéndose sometido a una delicada operación qué salió exitosa.
Su recuperación depende de medicamentos y terapias que aún su EPS no le brinda.
“Los médicos no le daban muchas esperanzas de vida pero me aferré mucho a Dios Y pues a las 8 de la mañana lo metieron a cirugía. Más sin embargo las esperanzas eran muy pocas, el corazón lo tenía crecido, mas no le expulsaba la sangre que el cuerpo necesita y empezó con las tensiones altas, las tensiones bajas” manifestó la madre de Iván
Pero a la vida de esta familia llegó Adriana, un ángel sin alas que al conocer la triste historia se solidarizó contactando por medio de una amiga médicos cubanos que podían aportar para su recuperación.
” Llegan el miércoles (los médicos). Me dijeron que el miércoles venían a visitar el niño para mirar las condiciones en las que se encuentra y ya de ahí miran a ver de pronto ellos que pueden hacer por el niño en su tratamiento” dijo emocionada Adriana.
Hoy la madre del pequeño pide ayuda a las personas de buen corazón ya que no cuentan con los recursos para su alimentación, uno de los más principales: el Ensure, así como una colchoneta especial que necesita para lograr una recuperación exitosa.
