En Ocaña, Norte de Santander, una mujer fue víctima de un atraco, pero además de atacarla, los atracadores también le trasquilaron el cabello.
Los hechos ocurrieron en el barrio Betania de la ciudad; según versiones de los familiares de la víctima, el delincuente le robó el celular y la cartera, pero no conforme a esto tuvo que soportar la pérdida de su cabello.
La mujer, además, debió dirigirse a un salón de belleza a mandarse rapar toda su cabeza. Hasta ahora, la víctima no se ha sentido en condiciones de denunciar ante las autoridades competentes, debido a su estado emocional al parecer está muy afectada por la pérdida de su cabello.
Los habitantes del sector piden a las autoridades mayor presencia para evitar situaciones de este tipo.
Le puede interesar: Nuevo derrame de hidrocarburos por Intervención ilícita de tuberías en Puerto Wilches