Casi dos semanas después de que la firma contratista habilitó la mayor parte en la ampliación del tercer carril, en el primer tramo de la paralela oriental entre TCC y el Centro Comercial Parque Caracolí, los conductores no logran asimilar la nueva dinámica de movilidad implementada por la Dirección de Tránsito y Transporte de Floridablanca.
Desde el pasado 16 de octubre, cuando se dio vía libre por el casi kilómetro y medio de este nuevo trayecto, uno de los grandes inconvenientes ha sido llegar a la entrada del puente sobre la quebrada Zapamanga, aún no habilitado, donde se debe desviar por el barrio Lagos Dos para empalmar con la paralela en Molinos Altos, en cuyo tramo se invierte no menos de cinco minutos.
Algunos conductores piden a gritos la presencia de agentes de tránsito en los sectores más neurálgicos, con el fin de agilizar la movilidad y evitar accidentes cuando se intenta salir de la paralela hacia la autopista.
Otros florideños consideran que, por ahora, el propósito de agilizar la movilidad con la paralela oriental no ha funcionado, pues hay varios cuellos de botella que no se han podido solucionar.
A pesar del inconformismo general, las autoridades de tránsito hicieron un llamado para que conductores y peatones acaten lo informado a través de la señalización, y así se eviten cualquier incidente, mientras el invías habilite otro trayecto y concluya toda la obra.
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