Muchas familias bumanguesas compran a diario los alimentos que consumirán en el día o por mucho al siguiente y no pueden salirse del presupuesto. Sin embargo, cuando van a las tiendas se llevan sorpresas desagradables, cuando los precios suben sin previo aviso. Para evitar esto, la Secretaría del Interior adelanta diferentes controles en las tiendas de barrio.
Cuando en estos establecimientos se presentan casos de usura, mala calidad o publicidad engañosa, el consumidor prefiere cambiar de lugar, en vez de denunciarlo, muchas veces por falta de interés o desconocimiento de la ley.
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Es necesario que las personas conozcan que existe una inspección de pesos, precios y medidas en Bucaramanga y está a cargo de la Secretaría del Interior.
A pesar de que los distribuidores y expendedores pueden fijar de manera libre y autónoma los valores a cobrar de acuerdo con su estructura de costos y su margen de utilidad, la excepción a este régimen general la constituye el control de precios.
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