El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, volvió a generar polémica tras una curiosa declaración que muchos calificaron como extravagante y fuera de lugar. En tono jocoso, el mandatario aseguró que actualmente es “más famoso” en Estados Unidos que las estrellas del pop Taylor Swift, Karol G y Bad Bunny, comentario que rápidamente encendió las redes sociales.
“Uno no deja de sorprenderse, es que de verdad uno no deja de sorprenderse, y digo: ‘¡Coño, soy famoso! Soy más famoso que Taylor Swift en Estados Unidos ahorita, que Karol G, soy más famoso que Bad Bunny. Tengo ganas de grabar un disco, inclusive’”, expresó Maduro entre risas durante un encuentro con miembros del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
El líder chavista hizo esta afirmación mientras se refería al despliegue militar ordenado por el gobierno de Donald Trump en el Caribe, el cual Caracas considera una amenaza directa contra su soberanía.
Según Maduro, “se creó una alarma” internacional luego de que afirmara que el pueblo venezolano es “un poderoso movimiento popular unido y armado en defensa de su derecho a la paz y a tener patria”.
Le puede interesar: Itaipú inauguró planta solar flotante más grande del mundo sobre un embalse
El mandatario también se describió como “un muchacho de los barrios de Caracas, nacido un 23 de noviembre de 1962, y educado en las asambleas de la clase obrera caraqueña”, asegurando que su figura “le causa molestia al imperio norteamericano”.
“¿Qué temen de mí? Si no soy yo, es un pueblo de pie, bolivariano, chavista, dueño de su destino, que no será humillado ni rendido jamás”, enfatizó.
Horas antes, el número dos del chavismo, Diosdado Cabello, había llamado a la población a estar alerta frente a “las amenazas extranjeras”, aunque insistió en que “en Venezuela no va a pasar mayor cosa”.
El chavismo, una vez más, hizo un llamado a defender la llamada ‘revolución bolivariana’ ante la presencia militar de Estados Unidos en la región. Desde Caracas, el gobierno acusa a Washington de intentar un “cambio de régimen” y de buscar el control de los recursos naturales venezolanos, en especial el petróleo, bajo el pretexto de la lucha contra el narcotráfico.




