En Colombia, el cáncer de próstata continúa siendo uno de los principales desafíos para la salud masculina, en parte debido a la baja manifestación de síntomas en etapas tempranas y a las barreras culturales que impiden su detección oportuna. De acuerdo con la Cuenta de Alto Costo, a febrero de 2025 el país registró 71.609 casos prevalentes, y solo en 2024 se diagnosticaron 6.531 nuevos casos, además de 3.789 muertes asociadas a esta enfermedad.
A nivel global, las cifras también son alarmantes. Según datos del Observatorio Global del Cáncer (GLOBOCAN 2022), el cáncer de próstata registró 1.467.854 nuevos diagnósticos, consolidándose como uno de los tipos de cáncer más frecuentes entre los hombres.
En este contexto, y en el marco del Día Internacional del Hombre y la campaña mundial #Movember, la Fundación Santa Fe de Bogotá, la Corporación Luz Rosa y Bayer presentaron #ModoMostacho, una iniciativa dirigida a sensibilizar sobre la importancia de la detección temprana y a derribar mitos alrededor del cáncer de próstata.
Miedo, desinformación y estigma: las barreras que persisten
A pesar de los avances en divulgación y prevención, la resistencia masculina a realizarse chequeos persiste. Aunque el 87,6 % de hombres entre 50 y 59 años afirma conocer el examen de tacto rectal, solo el 34,6 % se lo ha practicado. Adicionalmente, el 70 % admite sentir miedo, vergüenza o desconocimiento frente al procedimiento.
Otros estudios revelan que el 31 % acudiría más fácilmente a consulta si no se requiriera el tacto rectal, lo que evidencia la necesidad de fortalecer la educación en salud masculina y de generar conversaciones abiertas sobre la enfermedad.
La detección temprana puede salvar vidas
El doctor Mauricio Plata, jefe del Departamento de Urología de la Fundación Santa Fe de Bogotá, insistió en que la detección temprana es determinante para la supervivencia. “Esta patología no presenta síntomas en sus etapas iniciales, por eso la consulta oportuna es muy importante. Incluir inicialmente la prueba de PSA y el tacto rectal en los chequeos a partir de los 45 años, o desde los 40 en hombres con antecedentes familiares, puede marcar la diferencia. Cuando la enfermedad se detecta a tiempo, la tasa de supervivencia a 5 años supera el 90 %”, afirmó.
Romper estereotipos para salvar vidas
Más allá del diagnóstico clínico, las barreras culturales siguen siendo un obstáculo. Según Alejandra Toro, directora de la Corporación Luz Rosa, “durante años se ha creído que el hombre debe ser fuerte, resistir el dolor y no mostrar vulnerabilidad. Pero es fundamental acabar con los tabúes y abrir espacios de conversación para avanzar en la detección temprana. Consultar a tiempo es un acto de autocuidado y amor propio”.
La directora también destacó la relevancia del acompañamiento emocional y la comunicación abierta en los hogares, elementos que influyen en la disposición de los hombres para buscar atención médica.
Avances que mejoran la calidad de vida
Desde el ámbito científico, los avances terapéuticos han ampliado las posibilidades de tratamiento. Para Liliana Torres, líder médica de oncología de Bayer, “la innovación es esencial para mejorar la calidad de vida de los pacientes, con opciones más eficaces, personalizadas y con menos efectos adversos”.
Educación, acción y diálogo: las claves del cambio
La iniciativa #ModoMostacho busca justamente abrir espacios de conversación y promover decisiones informadas. Expertos coinciden en que la lucha contra el cáncer de próstata debe abordarse desde una visión integral que incluya prevención, investigación, innovación clínica y derribo de barreras culturales.
La detección oportuna, sumada a la educación continua y al trabajo conjunto entre instituciones de salud, fundaciones, sociedad civil y sector privado, representa una oportunidad para reducir la mortalidad y mejorar la calidad de vida de miles de hombres en el país.




