La ciudad de Medellín permanece conmocionada tras la muerte de Matías Serna Ramírez, un niño de nueve años que falleció después de ingerir una pastilla que encontró en la calle mientras jugaba con sus hermanos. El hecho, ocurrido en un parque del norte de la ciudad, ha generado profunda tristeza y múltiples interrogantes entre la comunidad.

Según informó el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, el dictamen que determinará qué sustancia causó el fallecimiento podría tardar hasta un mes. Así lo confirmó John Byron Escudero Martínez, padrino del menor, quien relató en los micrófonos de Alerta Paisa cómo sucedieron los hechos.

Escudero explicó que Matías, en medio del juego y la curiosidad propia de su edad, encontró un paquete que contenía lo que serían presuntas drogas sintéticas. Sin comprender el peligro, el niño ingirió una de las pastillas. Al percatarse de la situación y de la gravedad del caso, los familiares lo trasladaron de inmediato al Hospital Concejo de Medellín. Pese a la rápida reacción, los médicos no lograron estabilizarlo y el menor falleció pocos minutos después.

La noticia se propagó rápidamente por el sector, generando consternación entre vecinos y allegados. El padrino aseguró que la familia está “destrozada” y atraviesa un dolor indescriptible. Añadió que funcionarios de la Alcaldía de Medellín ya se comunicaron con los padres para ofrecer acompañamiento psicológico y apoyo institucional durante el proceso de duelo.

El cuerpo de Matías fue sepultado ayer en una ceremonia íntima, marcada por el silencio y la incredulidad. Mientras su familia intenta asimilar la pérdida, las autoridades avanzan en la investigación y esperan el informe de Medicina Legal para esclarecer qué sustancia ingirió el menor y cómo llegó el paquete al lugar donde jugaban varios niños.