Una fuerte tormenta eléctrica, acompañada de vientos huracanados, azotó la noche anterior a Bucaramanga y dejó a su paso una estela de emergencias. El fenómeno natural afectó gravemente a barrios como Morrorrico, Buenos Aires, Miraflores y sectores del norte de la ciudad, donde se reportaron caídas de árboles, postes de luz, techos colapsados y deslizamientos de tierra.

Según el teniente Édgar Ochoa, del Cuerpo de Bomberos de Bucaramanga, “se presentaron múltiples caídas de árboles, postes de luz, cuerdas de alta tensión, techos y muros colapsados, además de deslizamientos de tierra de diversas magnitudes, especialmente en el norte, pero también en sectores como Bucaramanga y Terrazas”.

La tormenta también causó cortes del servicio de energía en varias zonas, debido a la caída de postes y cables. La Electrificadora de Santander (ESSA) trabaja desde la madrugada en la restauración del servicio, priorizando las áreas más afectadas.

Una de las situaciones más complejas se presentó en la vía que comunica a Bucaramanga con el municipio de Matanza, donde árboles de gran tamaño fueron arrancados de raíz, bloqueando completamente el paso. Personal con maquinaria pesada adelanta labores de remoción para habilitar nuevamente el tránsito vehicular.

Como medida preventiva, el parque La Flora fue cerrado al público mientras se realizan trabajos de limpieza y remoción de árboles y ramas caídas. Las autoridades advirtieron sobre el riesgo de nuevos desprendimientos y acumulación de lodo en la zona, por lo que recomendaron evitar el tránsito por este espacio.

Las autoridades reiteran el llamado a la ciudadanía a mantenerse informada a través de los canales oficiales, evitar zonas de riesgo y reportar cualquier emergencia. Los organismos de socorro continúan en alerta para atender nuevos reportes en la ciudad.