Ante muerte del joven santandereano Miguel ángel Prada Camacho en los Estados Unidos, y la odisea de su familia para lograr traer el cuerpo, surgió la duda de qué hacer cuando un familiar muere en el extranjero. Aquí la historia de tres familias donde sus seres queridos salieron de Bucaramanga a buscar calidad de vida pero murieron cumpliendo sus sueños y para ellos empezaría la peor tragedia de sus vidas.
Prada Camacho, oriundo del barrio Nápoles, de Bucaramanga, emprendió su sueño americano hace tres años, pero el pasado 2 de julio fue víctima de un accidente de tránsito, cuando conducía su motocicleta.
Desde que se conoció la noticia, sus familiares viven la odisea más grande, pues buscan los medios necesarios para repatriar el cuerpo del joven, así como los mecanismos por redes sociales y personas de buen corazón que aporten una donación económica.
Tenga en cuenta
Ante este caso surgió la duda de qué hacer cuando un familiar muere en el extranjero. Aunque la Cancillería presta asistencia, los gastos deben correr por cuenta de los familiares. Por ejemplo, Jesús Rey, hermano de Armando Rey Almeida, quien murió de 64 años en Chicago en el 2011, no pudo traer a Colombia el cuerpo de su familiar, pues los gastos oscilaban entre 25 y 30 millones de pesos, dinero con el que no contaba la familia.
El drama que atraviesa la familia de Miguel Ángel supera los 60 millones de pesos. El panorama es desalentador pero la firmeza y la fe que tienen los Prada Camacho ha tocado los corazones de cientos de personas que han ayudado con la causa. gracias a las redes sociales.
¿Y qué debo hacer?
Por su parte, la Cancillería asegura que lo primero que se debe hacer es definir si se repatria el cuerpo o se realiza un acto de cremación en el país donde ocurrió la muerte y se trasladan las cenizas.
Así fue el caso de un joven de 27 años, que hace mes y medio perdió la vida en un accidente de tránsito en los Estados Unidos. Su familia que habló fuera de micrófonos, contó la decisión de cremar el cuerpo, que costó entre los 10 y 20 millones de pesos, proceso que tardó entre 10 y 15 días.
Tres historias diferentes, el mismo sueño americano y la tragedia que los alejó de su familia.