Un emotivo gesto de humanidad y solidaridad tuvo lugar en el Hospital Universitario Crosshouse, en Escocia, donde el personal organizó una boda sorpresa para Carol, una paciente terminal de cáncer, con el fin de que pudiera ver casarse a su hijo.

La ceremonia, celebrada en apenas 24 horas, reunió a familiares, amigos y personal médico, quienes trabajaron para que cada detalle fuera especial. El equipo del hospital decoró la sala con flores y globos, el área de catering proporcionó comida y bebidas, y el equipo de fotografía se encargó de capturar los momentos más significativos.

El hijo de Carol expresó su emoción por haber podido compartir ese momento con su madre: “Tener a mi madre allí fue muy importante”. Para Carol, la boda representó la oportunidad de vivir un instante de felicidad y orgullo, celebrando la unión de su hijo pese a su delicado estado de salud.

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El hospital destacó que este tipo de gestos reflejan su compromiso con el bienestar integral de los pacientes, mostrando que la atención médica no se limita al tratamiento físico, sino que también incluye el apoyo emocional y espiritual en momentos significativos de la vida.

La emotiva historia ha conmovido a la comunidad y se ha compartido ampliamente como un ejemplo de cómo los actos de empatía y solidaridad pueden marcar la diferencia en la vida de las personas.