La Fiscalía General de la Nación reveló que la principal hipótesis del atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay apunta a motivaciones políticas. Según el ente acusador, el intento de homicidio se habría producido por su condición de senador y precandidato presidencial del partido Centro Democrático, en medio de un contexto de alta exposición y sin la debida protección por parte de la Unidad Nacional de Protección (UNP).
El atentado ocurrió el pasado 7 de junio en el barrio Modelia de Bogotá, cuando Uribe fue atacado con un arma de fuego. Como parte del proceso, ya fueron capturados varios presuntos implicados, entre ellos un menor de 15 años, quien habría accionado el arma; William Fernando Cruz, Carlos Fernando Mora González y Katerine Andrea Martínez, alias Gabriela, señalada de entregar el arma al adolescente.
Durante la última audiencia, alias Gabriela, capturada en Caquetá, fue imputada por tentativa de homicidio y porte ilegal de armas, en calidad de coautora. En el mismo proceso, la Fiscalía afirmó que el senador había advertido en múltiples ocasiones sobre su situación de riesgo, sin que se le asignara la debida protección estatal.
“El atentado se produce en el marco de su campaña política y por pertenecer a un partido declarado en oposición. No hay evidencia de que existieran amenazas personales, familiares o económicas”, aseguró la fiscal del caso.
Petro rechaza hipótesis de motivación política
El presidente Gustavo Petro se pronunció en contra de la hipótesis planteada por la Fiscalía. En su cuenta de X, cuestionó la afirmación de que el ataque tuviera motivaciones políticas, asegurando que aún es prematuro afirmarlo con certeza.
“Eso no se puede decir aún. Aunque es una hipótesis, no se puede asegurar que haya fines políticos en el atentado, y menos aún, cuál sería ese interés”, escribió Petro.
Paradójicamente, el propio mandatario había lanzado días antes una teoría distinta, en la que sugería que la mafia internacional podría estar detrás del atentado, hablando incluso de una «nueva junta del narcotráfico».
¿Quién estaría detrás del ataque?
De acuerdo con la Fiscalía, alias El Costeño sería el cabecilla de la estructura criminal que organizó y ejecutó el atentado. Este sujeto, con vínculos con actores ilegales en el departamento de Caquetá, cuenta con al menos 24 procesos judiciales, incluidos cargos por tentativa de homicidio, desplazamiento forzado y porte ilegal de armas.
Según la fiscal del caso, El Costeño contactó a los implicados, incluyendo al menor de edad, para llevar a cabo el crimen. Noticias Caracol reveló que habría pruebas que lo vinculan como el articulador del ataque.