Una vez más la violencia enluta a una familia en Bucaramanga. En la noche del jueves 16 de octubre, un joven de 22 años identificado como Sneider Durán Amado de 22 años fue asesinado a sangre fría en un ataque sicarial que ha generado consternación entre los habitantes del norte de la ciudad.

El crimen se registró hacia las 8:22 p. m, cuando Durán se movilizaba en su motocicleta Yamaha, de placa NOT-20A, por la carrera 10 con calle 21N del barrio Kennedy. De acuerdo con las versiones preliminares, sujetos armados lo interceptaron a bordo de otra moto y, sin mediar palabra, le dispararon en repetidas ocasiones, dejándolo gravemente herido sobre el pavimento.

Vecinos del sector, alarmados por los disparos, salieron de sus casas y encontraron al joven tendido junto a su motocicleta. “Todo fue muy rápido. Solo se escucharon los tiros y luego vimos al muchacho en el suelo. Algunos intentaron ayudar, pero ya estaba muy mal”, relató uno de los testigos.

La patrulla del cuadrante llegó rápidamente y, ante la gravedad de las heridas, los uniformados trasladaron al joven en una moto oficial hasta el Hospital Local del Norte. Allí, minutos después, los médicos confirmaron su fallecimiento.

Avanza la investigación

La Seccional de Investigación Criminal (Sijin) de la Policía Metropolitana de Bucaramanga se hizo presente en el lugar del atentado para recolectar pruebas, recopilar testimonios y revisar cámaras de seguridad que puedan ayudar a identificar a los responsables. Además, se realizó la inspección técnica al cadáver en el centro asistencial.

Hasta el momento, las autoridades no han confirmado los móviles del crimen, aunque no descartan que esté relacionado con retaliaciones o disputas en el control territorial de economías ilegales. La ciudad ha registrado un aumento de homicidios en algunas comunas del norte en las últimas semanas, lo que preocupa a las autoridades locales.

“Estamos trabajando con nuestras unidades investigativas para dar con el paradero de los autores materiales e intelectuales de este crimen. No descansaremos hasta esclarecer lo ocurrido”, indicó una fuente de la Policía.

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¿Quién era Sneider Durán?

Sneider residía en el barrio Betania y era conocido por sus labores como ayudante de obra y mototaxista, actividad con la que complementaba sus ingresos. Compañeros y vecinos lo describen como un joven trabajador, responsable y con deseos de salir adelante. Su cuerpo permanece en la morgue del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, donde se le practicarán los estudios forenses correspondientes antes de ser entregado a su familia.

Mientras tanto, en redes sociales se han empezado a conocer mensajes de despedida y llamados de justicia por parte de amigos y conocidos, que no comprenden por qué alguien como Sneider fue víctima de un acto tan violento.

Inseguridad en aumento

Este nuevo caso se suma a una serie de hechos violentos que han encendido las alarmas en Bucaramanga y su área metropolitana. La percepción de inseguridad en sectores como el norte, donde abundan el mototaxismo informal y la falta de presencia estatal, se incrementa con cada crimen que queda sin resolver.

Las autoridades han reiterado su compromiso para reforzar los patrullajes y adelantar planes de intervención integral, pero la ciudadanía exige resultados concretos y respuestas urgentes.