La tranquilidad del norte de Bucaramanga se vio interrumpida por un violento homicidio registrado en la mañana de este martes 22 de octubre, un taxista identificado como Harold Mauricio Vásquez Mariño, de 43 años, fue asesinado a tiros frente a su vivienda en el barrio Villa Helena, en un ataque perpetrado por dos hombres que se movilizaban en una motocicleta.
Según las primeras versiones, los agresores esperaron durante varios minutos en una esquina cercana a la cancha del sector, aguardando a que Vásquez Mariño saliera de su casa, cuando la víctima apareció, los sicarios se le acercaron rápidamente y le dispararon en repetidas ocasiones, justo frente a la dirección calle 16N #25-30.
Seis disparos a quemarropa
De acuerdo con el informe de las autoridades, Harold Mauricio Vásquez recibió al menos seis impactos de bala, uno en la parte inferior de la mandíbula, otro en el pómulo derecho, uno más en el brazo izquierdo, otro en el pecho y los restantes en la espalda y la zona lumbar.
Los vecinos, alarmados por los disparos, salieron a la calle y trataron de auxiliarlo. La víctima fue trasladada de inmediato en el mismo taxi que conducía, un vehículo de placas TTW-392, hasta el Hospital del Norte, pero los médicos confirmaron que llegó sin signos vitales.
Tras cometer el crimen, los homicidas emprendieron la huida a bordo de la motocicleta, tomando una ruta hacia una zona boscosa cercana, lo que dificultó su persecución. Las autoridades desplegaron un operativo en los alrededores para dar con su paradero.

Las primeras hipótesis
El coronel Luis Quintero, vocero de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, confirmó que Vásquez Mariño tenía varios antecedentes judiciales, entre ellos lesiones personales, fuga de presos, uso de documento falso, abuso de confianza, injuria y porte de estupefacientes.
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De acuerdo con las primeras investigaciones, el crimen podría estar vinculado a actividades relacionadas con el microtráfico.
Las autoridades no descartan que el taxi de la víctima haya sido utilizado para el transporte de sustancias ilícitas en el sector conocido como Claverianos, zona identificada por la Policía como un punto de expendio de droga.
“Todo indica que el homicidio podría tener relación con disputas por microtráfico. Sin embargo, el caso sigue bajo investigación para esclarecer los móviles exactos y capturar a los responsables”, indicó un portavoz de la institución.
Investigación en curso y llamado a la comunidad
El caso fue asumido por unidades del CTI de la Fiscalía y del Grupo de Homicidios de la Policía Metropolitana, que adelantan labores de inteligencia, revisión de cámaras de seguridad y recolección de testimonios para identificar a los sicarios. Mientras tanto, los residentes del barrio Villa Helena manifestaron su temor por la inseguridad que se ha venido incrementando en la zona y pidieron mayor presencia de las autoridades para prevenir nuevos hechos violentos.
“Esto fue terrible. Se escucharon los disparos y todo el mundo se escondió. Aquí ya no se puede salir tranquilo”, relató un vecino del sector.
La Policía Metropolitana de Bucaramanga ofreció una recompensa por información que permita ubicar a los responsables del homicidio y reiteró que toda colaboración ciudadana se mantendrá bajo absoluta reserva.