Una familia judía que vive en el municipio de El Socorro estuvo velando durante varios días a un niño que murió a causa de una enfermedad cardíaca, a la espera de que resucitara. La policía tuvo que intervenir para que lo sepultaran.
El pequeño de tres años había muerto hace algunos días. Sin embargo, sus padres no lo habían sepultado esperando un milagro divino. Para ellos la resurrección, como sucedió con Jesucristo, debía llegar unos días después de la muerte.
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Una cardiopatía habría sido la causa de la muerte del niño. Un hecho que causó asombro en la comunidad, que se hizo mayor cuando se enteró de que no había sido sepultado tres días después de su fallecimiento.
El caso se conoció debido a que de la vivienda de la familia, ubicada cerca de la Terminal de Transporte, salía un olor fétido, que hizo que algunos habitantes de la zona dieran aviso a las autoridades.
