La temporada decembrina, tradicionalmente asociada con celebraciones familiares y actividades festivas, está convirtiéndose en un periodo crítico para perros, gatos y otras mascotas. De acuerdo con datos del Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA), entre noviembre de 2022 y noviembre de 2024 se registraron 1.901 animales afectados por situaciones relacionadas con estrés, de los cuales 702 eran mascotas de compañía.

El uso de pirotecnia continúa siendo el principal detonante. Aunque cada año se realizan campañas de prevención, el estruendo, las vibraciones y los destellos de la pólvora generan episodios severos de pánico en los animales. Veterinarios advierten que en diciembre aumentan los casos de arritmias, desmayos, huídas repentinas e incluso fallos cardiacos, asociados al sobresalto extremo.

Además de la pólvora, los expertos señalan otros factores de riesgo: viajes largos, cambios bruscos en la rutina, ausencias temporales de los cuidadores y la llegada de visitantes, situaciones que pueden desorientar y alterar emocionalmente a las mascotas. Los síntomas más comunes incluyen respiración acelerada, temblores, vómito, salivación excesiva y comportamientos agresivos o erráticos. Esto se explica porque su sistema auditivo tiene una sensibilidad hasta tres veces mayor que la de los humanos.

La Dra. Laura Peña, del área médica veterinaria de Heel Colombia, subraya la importancia de la prevención: “Debemos actuar de manera empática para proteger a las mascotas. Es fundamental establecer un plan de manejo del bienestar con un refugio insonorizado, actividad física temprana y opciones de soporte natural para la calma. Nunca se deben administrar sedantes sin indicación profesional, ya que una dosificación incorrecta puede comprometer seriamente la salud del animal”, indicó.

Recomendaciones para los cuidadores

Las autoridades y especialistas recomiendan tomar medidas anticipadas durante los días de mayor ruido, especialmente el 24 y 31 de diciembre:

• Crear un espacio seguro donde el animal pueda refugiarse.
• Acompañarlos o mantenerlos activos durante los momentos críticos.
• Reproducir música relajante para disminuir el impacto del ruido.
• Evitar dejarlos solos en jornadas festivas.
• Realizar ejercicio en la mañana para reducir la tensión acumulada.
• Consultar siempre al veterinario antes de medicar.
• Considerar alternativas naturales y no sedantes, como la Medicina Biorreguladora, que contribuye al equilibrio emocional.

Aunque ciudades como Bogotá impulsan campañas contra el uso de pólvora, solo el 30% de los ciudadanos participa activamente en estas iniciativas, lo que evidencia la necesidad de mayor educación y compromiso para prevenir afectaciones en los animales.