La Secretaría de Salud de Piedecuesta capacitó a 100 líderes y lideresas comunitarias como vigías en salud pública, una estrategia que busca reforzar la prevención y el reporte temprano de riesgos sanitarios en los sectores más vulnerables del municipio.
La iniciativa se implementa en un contexto crítico para Santander. Solo en 2025, el departamento ha registrado 4.916 casos de dengue, según la Gobernación, además de un aumento sostenido en eventos asociados a riesgos sanitarios y más de 4.500 casos de violencia intrafamiliar, sexual o contra niñas, niños y adolescentes, de acuerdo con datos del Observatorio de Salud Pública. Ante este panorama, World Vision y la Secretaría de Salud local impulsan la Vigilancia Basada en Comunidad (VBC) como un modelo de articulación entre ciudadanía e instituciones.

Liderazgo comunitario para detectar riesgos
Los 100 vigías comunitarios fueron formados para identificar enfermedades, alertar sobre riesgos psicosociales, reportar casos de violencia, atender situaciones de negligencia, reconocer afectaciones ambientales y activar rutas institucionales de manera oportuna.
El proceso incluyó ejercicios de cartografía social, participación en comités de vigilancia y articulación con redes territoriales que hoy abarcan los cuatro puntos cardinales del municipio.
Primeros resultados
La estrategia ya muestra impactos concretos. Gracias a los reportes de los vigías, las autoridades han atendido:
- Situaciones de violencia contra niñas, niños y adolescentes en Guatiguará.
- Cuatro casos de varicela.
- Un caso de explotación y negligencia infantil.
- Otros reportes que se encuentran en seguimiento por parte de la Secretaría de Salud.
Estas alertas tempranas han permitido reducir riesgos y activar la atención institucional antes de que las situaciones escalen.

Reconocimiento y proyección
El proyecto ha sido destacado por la Secretaría de Salud Departamental, que resalta a Piedecuesta como referente en vigilancia comunitaria. La estrategia también fue presentada ante el Concejo Municipal como uno de los programas prioritarios de salud para 2025 por su aporte a la prevención, la participación ciudadana y la articulación interinstitucional.
Con esta red de 100 vigías comunitarios, Piedecuesta avanza hacia un modelo de salud pública más cercano al territorio, más participativo y con mayor capacidad de respuesta frente a riesgos sanitarios y sociales, especialmente aquellos que afectan a niñas, niños y adolescentes.




