Manifestantes impidieron que vándalos generaran desordenes.
Jóvenes que participaron en los desordenes fueron atendidos por policías luego de ser heridos en los disturbios.
Encapuchados lanzaban bombas incendiarias sin importar la presencia de ciudadanos que no pertenecían a las protestas generando caos y atentando contra la integridad de los presentes.
Al final de la jornada fueron los miembros del ESMAD los encargados de limpiar los destrozos causados por los ‘vándalos’
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