En un país donde casi todos los hogares compran leche, pero apenas la mitad la consume con regularidad, la conversación sobre su papel en la alimentación cobra especial relevancia. En la primera edición de “Diálogos Nutritivos”, un espacio educativo impulsado por Alpina, expertos del Centro Latinoamericano de Nutrición (CELAN) analizaron los mitos y realidades que rodean este alimento, reafirmando su importancia en todas las etapas de la vida.
La jornada, desarrollada en el marco del compromiso de Alpina con el bienestar alimenticio de los colombianos, buscó fomentar un consumo informado, consciente y respaldado por evidencia científica.
La leche: un superalimento para todas las edades
Contrario a ciertas creencias, la leche y sus derivados son alimentos con alta densidad nutricional. De acuerdo con el CELAN, su matriz láctea está compuesta por una red biológica en la que proteínas, grasas, vitaminas, minerales y compuestos bioactivos interactúan potenciando sus efectos sobre la salud.
Organismos internacionales como la OMS y la FAO recomiendan consumir de dos a tres porciones de lácteos al día, y un promedio anual de 170 litros de leche por persona. No obstante, en Colombia el consumo per cápita es de 148 litros, según datos de Asoleche.
La leche no solo es clave durante la niñez. En la adultez y la vejez, su aporte de calcio y proteínas ayuda a mantener la masa muscular y la densidad ósea. Además, productos fermentados como el yogurt y el kéfir, ricos en probióticos, contribuyen al equilibrio de la microbiota intestinal y favorecen la digestión.
Desmitificando creencias populares
Uno de los mitos más comunes sostiene que los alimentos procesados pierden su valor nutricional. Sin embargo, los especialistas coinciden en que procesos como la pasteurización o la fermentación mejoran la seguridad y la digestibilidad del producto.
Según Asoleche, el 87 % de los consumidores colombianos reconoce que la leche procesada mantiene su valor nutricional pese a los tratamientos industriales.
Otro mito recurrente es la idea de que “la leche de antes era mejor”. Una encuesta del gremio revela que el 60 % de los colombianos percibe la leche actual como “más aguada” y el 55 % la considera “menos beneficiosa que la de su infancia”. Sin embargo, la industria ha avanzado significativamente en control de calidad, trazabilidad y tecnología.
Gracias a procesos como la pasteurización, homogeneización y tratamiento UHT, y a una cadena de abastecimiento refrigerada y eficiente, hoy la leche conserva mejor sus nutrientes y llega con altos estándares de pureza a los hogares. Alpina, pionera en estos desarrollos, abastece actualmente el 97 % de los hogares colombianos.
“Los lácteos son el corazón de nuestra promesa nutricional. La leche es un superalimento que concentra una gran variedad de nutrientes que, en conjunto, aportan beneficios extraordinarios. En Alpina promovemos su consumo como parte de una alimentación equilibrada, porque creemos que una buena nutrición transforma vidas”, afirmó Paola Yanquen, gerente de Asuntos Regulatorios Alimentarios de la compañía.