El nombre del reconocido actor estadounidense Bruce Willis vuelve a ocupar titulares, esta vez por una decisión de profundo impacto científico y emocional: su familia confirmó que, cuando fallezca, su cerebro será donado a la investigación médica para avanzar en el estudio de la demencia frontotemporal, enfermedad que le fue diagnosticada en 2023.
Willis, recordado mundialmente por su icónico papel en la saga Duro de matar y una filmografía que supera las 70 producciones con más de 7.500 millones de dólares recaudados en taquilla, se retiró de la actuación en 2022 tras ser diagnosticado con afasia. Un año después, el diagnóstico evolucionó hacia demencia frontotemporal, un trastorno que afecta áreas del cerebro relacionadas con el comportamiento, el lenguaje y la personalidad.
Su esposa, Emma Heming Willis, confirmó la decisión a través de una publicación en redes sociales, en medio del éxito editorial de su libro The Unexpected Journey, que recientemente ingresó a la lista de los más vendidos de The New York Times. En su mensaje explicó que el análisis del cerebro del actor podrá “ayudar a identificar alteraciones como proteínas anormales, cambios estructurales o mutaciones que hoy son difíciles de observar”, aportando información clave para comprender esta enfermedad neurodegenerativa.
La decisión ha sido respaldada por toda la familia, incluida su exesposa Demi Moore y sus cinco hijas: Rumer, Scout y Tallulah, fruto de su matrimonio con Moore; y Mabel Ray y Evelyn Penn, hijas de su relación actual con Heming Willis.
El estado de salud del actor se ha deteriorado aceleradamente en los últimos dos años. De acuerdo con declaraciones previas de su esposa a medios internacionales, Willis reside actualmente en un centro especializado que garantiza atención médica permanente y adecuaciones que facilitan su movilidad.




