Según Leticia Tirado, Comisaria de Familia de Piedecuesta, una vez se conoció el oficio del ICBF, precedió, junto con la policía, a retirar de ese hogar a seis niñas y un niño, hijos biológicos del señalado violador, cuatro de los cuales manifestaron en entrevistas que su padre las accedía carnalmente.
“El caso se conoció mediante un oficio que nos envió el ICBF donde manifiesta que al parecer 4 niñas estaban siendo abusadas por su progenitor, inmediatamente acudimos con la Policía Nacional, retiramos los niños, son 7 niños con un varoncito, los traemos a la oficina y le hacemos la inspección psicológica en aras de establecer cómo está su salud”.
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Al momento de interponer la denuncia, “el clima estuvo pesado”, puesto que los padres estaban encima de las niñas para que “no hablarán”, que no fueran a decir lo que estaba sucediendo. Una de las menores dijo que efectivamente el papá las tocaba y que accedían para evitar que el hombre hiciera lo mismo con los niños más pequeños.
Los presuntos abusos contaban con el beneplácito de la madre, quien nunca denunció las agresiones sexuales cometidas por su pareja contra sus hijas.
“La mamá tenía conocimiento al parecer desde hace 4 años pero no lo denunció porque decía que le daba miedo“.
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Las víctimas fueron llevadas a Medicina Legal, donde se estableció que había acceso en las cuatro niñas, quienes quedaron bajo protección de las instituciones del estado y de una tía materna, mientras se adelanta la investigación penal contra los acusados.