Luego de más de 5 horas de debate, los estudiantes decidieron suspender el paro y regresar a clases, no sin antes definir nuevas estrategias de presión para que el gobierno cumpla con los pactos en beneficio de la educación superior pública.
Otro de los puntos acordados se refiere a la representación del gobierno departamental y la alcaldía de Bucaramanga en las mesas técnicas planteadas.
El cese de actividades se prolongó por más de tres meses que generaron pérdidas en diferentes sectores. Uno de ellos fue la empresa Metrolínea que dejó de percibir más de cuatro millones de pesos por transporte de estudiantes.
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