No hay palabras para describir el dolor y la tristeza que enluta a la familia de Ana Karina Blanco Durán, la joven de 15 años que fue violada, asesinada y lanzada al río Cáchira, en la vereda los Alpes del corregimiento de La Vega, Norte de Santander.
Oro Noticias conoció un fragmento escrito por la misma jovencita el pasado 21 de abril, cuando en el colegio le pedían escribir su proyecto de vida.
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Ana Karina cursaba once grado y su único fin era ser feliz, terminar de estudiar y ayudar a su mamá a quien la describió como una mujer guerrera y maravillosa. Le encantaba leer comedia romántica.
“En un año me veo iniciando mi carrera en una universidad, para mi sería la puerta principal para cumplir sueños, comprarle esa casita a mamá que tanto quiere y ser una mujer llena de felicidad e independiente”.
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En la misiva también decía que le asustaba crecer, “creo que el mundo me enseñó a madurar muy pequeña, no me siento capaz de enfrentar este mundo, o tal vez si este preparada, eso se lo dejaremos al destino”.
Finaliza diciendo “me encantaría ver a mis amigos, pero sobre todos a mis hermanos cumplir sus sueños. Mi proyecto a largo plazo sería ser una gran psicóloga“.
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