La delincuencia se ha desplazado a diferentes barrios del área metropolitana de Bucaramanga.
En cámaras de vigilancia han quedado grabados hurtos de canastas, bicicletas y hasta materos que sus propietarios dejan abandonados a las afueras de sus residencias.
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Uno de los casos particulares le ocurrió a este domiciliario que mientras almorzaba en su vivienda, un sujeto, portando un cuchillo, le robó la canasta en que transporta los pedidos.
Como hecho especial, el ciudadano afectado señaló que había dejado algunos documentos personales dentro de su canasta, y más tarde lo citaron para entregárselos en el mercado de las pulgas.
Pero este caso no es el único que ha quedado registrado en cámaras de vigilancia.
En el barrio Caracolí de Floridablanca este sujeto, en horas de la noche, se robó una matera.
Y en el barrio Alfonso López, utilizando un alicate, este delincuente se llevó una cicla que su propietario había dejado protegida con una cadena, en las afueras de su vivienda.
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Hurtos de mínima cuantía pero que siguen generando sensación de inseguridad entre los habitantes del área metropolitana de Bucaramanga.