Más de un metro de ancho tiene el hueco que mantiene incómodos a los conductores que recorren la calle 61, en intersección con la carrera 17 de Bucaramanga. Peatones y motorizados aseguran que la congestión y el riesgo es constante.
Tierra, basura y piedras son el intento de relleno acumulado en el enorme hueco, que le hace trampa al paso de quienes transitan por la carrera 17 con calle 61 de la capital santandereana y que hasta el momento, ha generado constante riesgos, según los vecinos de la zona.
Una rama de palma y un par de cartones intentan simular una señal de peligro, que para los conductores ha sido completamente insuficiente.
Quienes hacen su paso por esta intersección esperan que la autoridad correspondiente se haga cargo de ésta atrocidad en la vía
