Estudiantes del colegio Sergio Ariza del municipio de Sucre, Santander, se encuentran en riesgo por la mala condición en la que se encuentra la sede de bachillerato.
Pisos y techos de seis salones registran grandes grietas. Incluso, un muro está sostenido con palos para evitar que se desplome.
Según Diego Buriticá, quien hizo la denuncia, hasta el momento ninguna autoridad ha tomado cartas en el asunto, con la preocupación evidente que pueda ocurrir una tragedia.
Pese a que algunos estudiantes fueron reubicados en otros salones de clase para alejarlos del peligro, la medida no ha permitido el normal desarrollo de las actividades educativas, pues ahora se encuentran prácticamente hacinados, situación que va en contra los requisitos pedagógicos para recibir clase.
Según las directivas del plantel, hace 12 años el colegio no recibe mantenimiento.
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