Por incultura, conductores de motocicletas y hasta de automóviles han sido sorprendidos cruzando la zona para peatones que está sobre el separador de una vía en Girón. Lo que más asombra es que a tan solo 300 metros se construyó el retorno destinado para efectuar esa maniobra. Violar la norma puede resultar costoso.
El angosto espacio diseñado para que los caminantes atraviesen la carrera 19, sin problemas, a solas, en sillas de ruedas o acompañados por menores de edad, se ha convertido en un cruce improvisado para automotores. Algunos atraviesan de un lado al otro, interfiriendo en el tráfico habitual de la vía.
Esta es una situación que para los habitantes del sector representa un riesgo constante, máxime cuando se sabe que hay un colegio cerca.
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Por esa razón las autoridades determinaron la implementación diaria de actividades de prevención y de operativos de control, e incluso han registrado en cámara esas imprudencias para luego mostrárselas a los infractores.
Según el Secretario de Tránsito y Transporte del municipio, quien sea sorprendido en un automotor invadiendo áreas peatonales, atravesándose en sardineles o cruzando en contra vía, entre otras maniobras peligrosas, será multado con una suma que oscila entre los 414 mil pesos y hasta un salario mínimo legal mensual vigente.
