Comerciantes y fabricantes de calzado del barrio San Francisco de Bucaramanga advirtieron que se encuentran al borde de la quiebra por las graves afectaciones que han sufrido a causa de la pandemia y del paro nacional, pero sobre todo por la invasión de zapato importado y de contrabando que inunda los mercados local y nacional.
Los establecimientos y las calles vacías reflejan la crisis que afronta este reconocido sector de la capital santandereana, todas estas circunstancias de pandemia, paro nacional e ingreso de calzado extranjero, han agravado el caótico panorama de los tradicionales vendedores y fabricantes de zapatos en la ciudad.
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Infortunadamente Bucaramanga ha venido perdiendo paulatinamente su condición de capital del calzado en el país ya que el descenso en las ventas y las pérdidas económicas y de empleo han sido dramáticas por la radicalización de estos fenómenos.
Los comerciantes de San Francisco confían en que la ciudadanía respalde con sus compras a los fabricantes locales para mantener a flote uno de los renglones económicos más emblemáticos y tradicionales de Santander.
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