La labor que ejercen los padres de familia en la tribuna es muy importante al momento de alentar a sus hijos; sin embargo, hay quienes se meten tant pasión al cuento, que terminan por competir con los técnicos a la hora de impartir instrucciones en este Mundialito, lleno de curiosidades y momentos inolvidables.
Son impacientes, unos imparten instrucciones, otros reflejan angustia y nerviosismo, algunos solo se dedican a alentar, lo cierto es que los padres de familia se juegan su propio Mundialito en las gradas, pues mientras sus hijos se divierten, sus mentores terminan extenuados de gritar.
Claro, no faltan las recomendaciones en los momentos cruciales, pues al mejor estilo, emiten conceptos jugando un poco a ser técnicos.
Sin embargo, en el campo de juego estos talentosos niños parecen estar mucho más tranquilos, se divierten a placer y solo se limitan a hacer los que más les gusta, jugar al fútbol.
Diferentes formas de vivir y sentir el Mundialito, pero al fin y al cabo, todos unidos por una misma causa, el amor por sus hijos y por un sentimiento llamado fútbol, una pasión que no distingue cultura, raza, edad o género.
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