La Policía, con el apoyo de la Quinta Brigada y en coordinación con la Fiscalía, tendieron un cerco sobre el norte y el oriente de Bucaramanga para contrarrestar el accionar de bandas dedicadas al microtráfico.
Una de las tareas complejas es hallar las sustancias alucinógenas, pues los expendedores y distribuidores utilizan todo tipo de argucias para esconderlas.
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Los operativos seguirán realizándose con el fin de reducir al máximo el comercio de estupefacientes y de paso la disminución de los hechos de sangre ocasionados por las disputas de territorios entre las pandillas o ajuste de cuentas por causa de la venta de narcóticos.
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