El temor invade a los trabajadores de la Dirección de Tránsito de Piedecuesta, debido a las incesantes amenazas que han recibido anónimamente por redes sociales.
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“Las amenazas fueron a través de las redes sociales, chats clandestinos, gente que no se identifica”, explicó Ricardo Ardila, secretario de Tránsito de Piedecuesta.
Ardila, indicó que los principales sospechosos, son los ciudadanos que se dedican al transporte informal y algunos migrantes venezolanos que intimidan a los piedecuestanos en los semáforos, debido a que cuando se hace un operativo con estas personas, la mayoría de veces no portan documentos de identificación, ni revisión tecnomecánica, ni mucho menos un Soat.
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“El muchacho que conduce la grúa, vino hasta la oficina de Tránsito de Piedecuesta porque las personas le llegaron a la casa, quería renunciar al contrato porque necesitaba tranquilidad”, agregó.