Desde hace dos meses fueron hallados los restos de un cuerpo en el Río de Oro, cerca a Girón.
Luego de las pruebas de ADN se comprobó que era una de las víctimas de la avalancha en Piedecuesta, perteneciente a la madre del pequeño sobreviviente, Dylan Jaimes.
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En la tarde del pasado lunes se cumplió el sepelio en Lebrija a donde fue trasladado. A causa de la pandemia la familia decidió darle cristiana sepultura en un osario.
Con este ya son tres los cuerpos encontrados en los últimos meses, correspondientes a los desaparecidos por acción de la avalancha que se registró en la vereda el guamo de Piedecuesta.
Aún resta por recuperar el de uno de los hermanos del pequeño Dylan.
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