En medio de la pandemia, uniformados se dirigieron a una casa de un barrio del occidente de Bucaramanga, mientras hacían sus patrullajes de costumbre y presenciaron un milagro de vida.
El acto se registró en el barrio 12 de octubre, donde policías llegaron como caídos del cielo a una vivienda donde una mujer se encontraba en trabajo de parto.
Uno de los patrulleros que se encontraban en la vivienda, había recibido formación académica en prácticas asistenciales neonatales y decidió tomar las riendas de la situación y atender el parto de la menor, junto a sus compañeros que ejercieron la labor de enfermeros.
Luego de que la mujer dio a luz, los uniformados improvisaron una camilla y trasladaron a la mujer y a la bebé de nombre Cristina a un centro médico.
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Cristina, la recién nacida, fue dejada en observación médica y se recupera satisfactoriamente en el Hospital Universitario de Santander, los padres de la menor son de nacionalidad venezolana, quienes por sus bajos recursos no pudieron hacer los respectivos controles prenatales.
