Un niño de dos años falleció en un Hospital de Piedecuesta buscando un suero antiofídico. Una serpiente coral lo mordió en una pierna y en los centros médicos no contaban con el antídoto.
La abogada y familiar del pequeño relató los angustiosos momentos que vivieron al tratar de salvarle la vida luego de haber sido mordido por una serpiente coral en una finca de San Vicente de Chucuri.
El pequeño fue llevado inicialmente al Hospital de San Vicente, y luego su familia inició un recorrido por otros centros médicos en busca del antídoto, pero resultó infructuoso.
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Pese al esfuerzo de sus familiares, el pequeño falleció en el Hospital Internacional de Piedecuesta a causa del veneno que ingresó a su cuerpo y que no pudo ser neutralizado.
La familia del pequeño espera que el caso sirva para llamar la atención de las autoridades sobre la falta de este tipo de suero antiofídico, para que no se continúen presentando casos de esta naturaleza.
El cuerpo del menor fue reclamado por sus familiares en medicina legal de Bucaramanga y será trasladado a San Vicente para brindarle la cristiana sepultura.
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